Cada caso, con independencia de su protagonista, es diferente con independencia de sus circunstancias pero hay patrones que se repiten entre Carmina Ordóñez y Rocío Carrasco.
Fue inevitable recordar a la fallecida Carmina Ordóñez. De hecho, el hijo menor de Carmina, Julián Contreras ha identificado muchos aspectos de Rocío Carrasco con su madre.
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¿Qué tienen en común Carmina y Rocío Carrasco?
Guapas, educadas en los mejores centros educativos que el dinero puede pagar, ricas de cuna, famosas… Carmina Ordóñez y Rocío Carrasco lo tenían todo. Una perita en dulce muy golosa para cualquier desalmado con sed de fama y dinero que supiera embaucarlas.
Unos noviazgos fugaces. Carmina con tres hijos y dos matrimonios rotos a sus espaldas, decidió volver a vestirse de novia tras saberse cinco meses antes su relación de noviazgo con el bailaor. Rocío, en cambio estaba con la mayoría de edad reciente y se casó embarazada.
Es posible que Rocío no estuviera convencida de casarse o incluso llegar a tener dudas sobre su futuro marido pero pasó por el altar vestida de blanco, había que darse prisa para no ser madre soltera, algo muy mal visto y penalizados en muchos entornos. Si bien es cierto que la sociedad ha evolucionado, ser madre soltera seguía siendo algo demonizado en según qué entornos, por lo que Rocío Carrasco pasó por el altar embarazada de su hija.
Carmina Ordóñez y Rocío Carrasco han sido ninguneadas por parte de la sociedad por salir a denunciar públicamente su situación en un medio de comunicación de masas como lo es la televisión y por haber cobrado por ello.
¿En qué se diferencian?
Carmina Ordóñez
Carmina era nieta, hija ex mujer y madre de toreros. Se crió entre algodones y quizás para huir del control familiar se casó a los 17 años con el torero Francisco Rivera, más conocido como Paquirri. Producto de esa unión nacieron Fran Rivera y Cayetano Rivera, ambos dedicados a la tauromaquia. Carmina se divorcia de Paquirri, que terminará casado con la tonadillera Isabel Pantoja. Muchas voces afirman que Paquirri a pesar de estar casado con la tonadillera, seguía enamoradísimo de Carmina. Pero eso es otra historia.
El hecho es que Carmina se casa en segundas nupcias con Julián Contreras, con el que tendría a su tercer hijo, Julián Contreras Jr, cuyo matrimonio también termina en divorcio para finalmente terminar con el bailaor Ernesto Neyra. Un matrimonio fugaz (1997-1999) salpicado por numerosas polémicas.
No pasó desapercibida la imagen de Carmina posando para una revista con el ojo amoratado y la cara visiblemente hinchada por un supuesto accidente doméstico. Entre los periodistas de la época se entreveía un comportamiento abusivo del bailaor a la socialité, que llegó a ponerse tenso ante unas preguntas incómodas.
El ojo delator
Para añadir más dificultad a la situación, sus adicciones era un secreto a voces entre los más próximos a la Divina. Años después de su fallecimiento, dichas adicciones fueron reconocidas públicamente por sus hijos Francisco Rivera y Julián Contreras en entrevistas. No obstante, quién vivió el infierno de del tercer matrimonio de Carmina en primera línea fue Julián Contreras Jr siendo un niño.
Carmina fue señalada y ninguneada por parte de muchos periodistas que eran conocedores de los malos tratos que le propinaba Ernesto. Finalmente, el caso terminó desestimado y archivado por falta de pruebas. En esa época la sociedad no estaba concienciada ni conocía términos como maltrato o acoso, que a veces se usan muy a la ligera.
Años después Ernesto vuelve a casarse, en esta ocasión con la modelo Lely Céspedes cuyo matrimonio también se extinguió. La diferencia es que poco se pudo saber salvo la primera paternidad de Ernesto y Lely. Lely siempre fue más discreta, quizás huía de las polémicas o por miedo de ser ninguneada como le pasó en su día a Carmina. Hasta que años después, en agosto de 2020 se supo a través de numerosos medios que Ernesto comenzó a faltar en sus pagos de la pensión de sus hijos en el 2007. Estos y otros detalles dieron lugar a una Lely desesperada por su situación, arrepintiéndose de no haber denunciado antes. Es impactante ver el rostro de Lely descompuesto mientras relata los supuestos comportamientos abusivos de su ex marido y padre de sus tres hijos.
Rocío Carrasco.
Hija única, famosa de cuna desde que nació, en un ambiente quizás, sobreprotector que posiblemente vio en Antonio David la posibilidad de vivir sin las normas familiares.
Se casa con la mayoría de edad recién cumplida y embarazada de su hija, protagonizando exclusivas con el ex miembro de la Guardia Civil.
Antonio David no cae en gracia a la familia de Rocío Carrasco, no es que los padres sean infalibles y sepan cuando no se debe casar pero en el caso de Rocío Carrasco, era algo evidente. Gran parte del público veía esa relación con cierto grado de escepticismo y no se equivocaron. Tiempo después Rocío Carrasco pidió la separación.
Desde esa separación, la ex pareja rehízo su vida tiempo después. Antonio David con Olga Moreno y Rocío Carrasco con Fidel Albiac. En el caso de Fidel Albiac, Rocío Jurado estaba encantada con la nueva pareja de su hija.
¿Será Olga Moreno la próxima Lely? Por el momento, estamos ante un matrimonio duradero y aparentemente feliz desde que se juraron amor hasta la tumba allá por el 2009.
